La vuelta a la rutina puede ser algo complicado, sobre todo si has tenido unas vacaciones increíbles. Lo cierto es que el cambio de tiempo no ayuda. Pese a que todavía quedan algunas afortunadas que disfrutarán de esa escapada final, despedirnos del verano es una de las cosas que, por norma general, menos nos gusta. ¡No dejes que la rutina te agobie! Te dejamos 5 consejos para que no haya vuelta, si no continuidad.
Llénate de motivación y energía positiva
Intenta plantear nuevos objetivos que te motiven este año y que hagan que tu día a día sea más dinámico. Levántate al primer ruido del despertador, pisa con el pie derecho y arráncate una enorme sonrisa. Que sí, que ha sonado muy Mr. Wonderful, pero es que lo primero es la actitud, así que no te pongas quisquillosa…¡y a sonreír! 😉
¿Has probado hacer una playlist llena de canciones que te carguen de energía? Elige esos hits que te hagan mover el esqueleto y te inunden de buenas vibras.
También puedes crear un tablón e ir colgando cositas que te inspiren (sí, como en las películas. Y no, Pinterest no cuenta) con frases motivadoras, metas que quieras lograr o fotos que te inspiren. Un vistazo rápido a eso puede cambiar tu perspectiva de todo el día.
Recuerda celebrar tus logros, por pequeños que sean. A veces nos enfocamos demasiado en lo que falta por hacer y olvidamos lo mucho que ya hemos logrado. ¡Sí, eres una estrella en ascenso y cada pequeño paso cuenta!
Y no te olvides de rodearte de personas que te inspiren y te motiven. ¡El buen rollo es contagioso! Compartir con aquellos que te llenan de cosas bonitas sirve para recargar pilas.
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Encuentra momentos para ti
Si vuelves de las vacaciones un domingo y te incorporas a la rutina el lunes siguiente, es más probable que el impacto sea más duro que si dejas uno/s día/s entremedias para habituarte a los horarios rutinarios y adaptarte mejor al cambio de estilo de vida. La realidad es que nos encanta apurar al máximo las vacaciones y los días fuera de casa, pero siendo prácticas, volver un poco antes para ‘descansar de las vacaciones’ es una cosa muy útil. Ya lo dicen las madres…
Ah, y estaría bien si buscas tiempo para ti, oye. Esa cosa llamada vuelta a la rutina no debería monopolizar tu vida. Encuentra esos momentos, aunque tengas que hacerlo a lo James Bond. Tú eres el 007 de tu tiempo. ¿Qué tal una noche de juegos con amigos para liberar el estrés del día? Piensa en esas risas como si fueran los bloopers de Pixar: absolutamente necesarios.
Y sí, ¡escápate un rato! Aprovecha la hora del almuerzo, sí, esa pausa intermedia entre “la vida real”. Usa ese tiempo para leer ese libro que tienes escondido en tu bolso o camina por el parque para recargar energías. No te sientas culpable por disfrutar esos momentos para ti.
Mientras te sumerges en este nuevo episodio, asegúrate de incluir en tu agenda esos momentos de relax, esos pequeños oasis que te permitan desconectar y recargar energías. ¿Un baño relajante? ¿Un paseo al atardecer? ¡O simplemente un rato para ti con tu pasatiempo favorito!
El secreto está en encontrar el equilibrio. La vuelta a la rutina no significa perder la espontaneidad y la alegría. Más bien, es una oportunidad para abrazar esos pequeños placeres que la vida cotidiana ofrece.
Inicia nuevos proyectos
Apúntate a un curso para mejorar tu segundo idioma, aprende a hacer ganchillo para crear tus propios regalos estas navidades… ¿Has pensado en sumarte a un club de lectura? ¿O a un taller de cocina o de manualidades? Apuesta por alguna actividad nueva o por mejorar alguna que ya tengas más o menos adquirida y plantéate un nuevo reto para este año.
¡Bienvenida al juego de la vida! Piensa en tu día a día como si fuera un videojuego donde cada desafío superado es un logro. ¡El primer paso para no perderse en este juego llamado rutina es establecer metas realistas! ¿Cómo hacerlo? Fácil, comienza con pequeñas misiones: como recolectar monedas en Mario Bros. No necesitas derrotar al jefe final de una vez. ¿Por qué esto es genial? ¡Porque al completar esos objetivos, obtienes una sensación de logro que te impulsa a seguir avanzando!
Así que, ¿lista para desafiar al nivel de la realidad? Puedes empezar por metas simples, como beber suficiente agua, dar un paseo corto, o leer unos capítulos de ese libro que tanto te gusta. Esas pequeñas victorias pueden ser la llave para desbloquear el próximo nivel en tu vida diaria. ¡Ahora prepárate para conquistar el mundo, pero poquito a poquito!
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Vuelta a la rutina ¡pero no a la vida sedentaria!
Olvídate de convertirte en un koala pegado a un sofá. La vuelta a la rutina no significa que tu vida tenga que ser más estática que un cuadro del Museo del Prado. ¿Qué tal si incorporas pequeñas dosis de actividad? ¡Vamos a darle chispa a esa rutina!
Hacer deporte es una vía de escape muy buena. Patinar, jugar al tenis o al pádel, iniciarte en el yoga, ir con amigas a pilates o atreverse con el running harán que la vuelta a la rutina sea más entretenida. Sea lo que sea, no dejes que te atrape el sedentarismo.
¡Exprime tu tiempo! Si tienes unos minutos libres, da un mini paseo. No hace falta hacer una maratón por el vecindario, pero sí un poco de movimiento, algo así como un calentamiento.
La tecnología es tu amiga. Hay miles de apps con ejercicios cortitos que puedes hacer en casa. Tú y tu móvil podéis ser el dúo dinámico que salva el día. Desde estiramientos hasta ejercicios HIIT, elige lo que más te guste y dale caña, ¡aunque sea por 15 minutos!
Y el truco infalible: ¡haz de todo un juego! Baila mientras cocinas o haz sentadillas mientras ves tu serie favorita. Pon un podcast, cascos y sal a caminar. Ya sabes, añade un toque de diversión y verás cómo esos momentos que antes parecían desperdiciados, se convierten en la actividad más entretenida del día. ¡A moverse se ha dicho!
Recuerda, tu vida no tiene por qué ser un capítulo repetido de una serie noventera, siempre puedes cambiar el canal hacia uno más activo y saludable.
Volver de vacaciones no significa que dejemos de tener momentos de ocio. No pienses que volver a la rutina es sinónimo de aburrimiento y cero planes. Organiza alguna escapada de fin de semana que te permita desconectar, alguna ruta por la montaña…¡cualquier plan es bienvenido!
La vuelta a la rutina no tiene por qué ser una caída en la monotonía, sino una oportunidad para abrazar nuevos desafíos y emocionantes aventuras. Es como ese comienzo de capítulo en tu serie favorita; quizás pienses que ya sabes cómo será, pero siempre trae sorpresas inesperadas.
Piénsalo de esta manera: cada vez que vuelves, puedes volver a empezar. Sí, puede haber horarios y tareas habituales, pero también hay una enorme caja llena de oportunidades nuevas. ¿Qué sorpresas te esperan? ¿Qué nuevos retos puedes afrontar? ¿Qué aprendizajes te esperan en este capítulo de tu vida?
El Attelier Magazine
