Seguro que has oído hablar del furor que está causando el consumo de colágeno últimamente. Una amiga tuya, una influencer a la que sigues o una compañera de trabajo te lo ha recomendado por sus beneficios “milagrosos” en la piel. Pero, ¿es verdaderamente efectivo?
Qué es el colágeno
Antes de sumergirnos en el debate, debemos saber qué es el colágeno para poder entender un poco esta reciente fiebre. Se trata de una proteína fundamental y más que abundante en nuestro cuerpo, ya que está presente en la piel, en los músculos, en los huesos y en los órganos. Es algo así como el pegamento o el cemento que une todas estas estructuras. Representa un 25% del total de la proteína corporal presente en nuestro cuerpo. En la piel es incluso mayor, siendo un 80%. Junto a la elastina, mantiene la piel elástica y firme.
A medida que nos hacemos mayores, nuestro cuerpo empieza a reducir la producción y por lo tanto presencia de esta proteína. Concretamente, a partir de los 30 años perdemos un 1% del total por año. Los agentes externos, como la contaminación, el estrés o la exposición solar, tampoco ayudan. El deporte también influye en la pérdida de colágeno en los cartílagos.
Dicho esto, una de las consecuencias naturales y evidentes, al envejecer, es la pérdida de firmeza y elasticidad en nuestra piel, dando lugar a arrugas, flacidez, pérdida de luminosidad, etc. No son pocos los que buscan una solución al respecto. Y, desde que Jennifer Aniston proclamó hace unos años que tomaba colágeno todas las mañanas, las ventas se han disparado más que nunca.
“Mis uñas están más fuertes y tengo… ¿cómo lo explicas? Un brillo. Es el tipo de cuidado que funciona desde dentro hacia fuera”, explicaba Aniston a Well + Good. El típico word of mouth o boca a boca. Hay una gran cantidad de reseñas abogando por sus beneficios y sus efectos “milagrosos”. Pero no es ningún milagro, y hay un gran debate candente sobre su posible efectividad.
¿Qué muestran los estudios?
Cada año, la venta de suplementos de colágeno crece más y más. Unos estudios abalan una mejor calidad de la piel, un menor desgaste de los cartílagos o un alivio para las personas que sufren de artritis.
Otros, defienden lo contrario. Parten del hecho de que, entre los componentes del colágeno, existen 3 aminoácidos: la glicina, la lisina y la prolina. Nuestro organismo absorbe y asimila estos aminoácidos de forma separada, y los emplea en distintas funciones, según las necesidades del organismo. Así, el colágeno deja de ser colágeno cuando entra en nuestro cuerpo y empezamos a separarlo en componentes. Con lo que, dicen estos estudios, no se tendría por qué crear o estimular la producción de colágeno necesariamente.
Al ser, además, una gran molécula, el cuerpo no la absorbe correctamente. Las farmacéuticas que lo promocionan, así, defienden el uso del colágeno hidrolizado (no importa si en polvo, en cápsulas o en bebidas) o péptidos. De esta forma, se deshace en pequeñas partículas de aminoácidos más fáciles de absoreber digestivamente. Pero, como hemos dicho, no tienen por qué ser utilizados para producir colágeno. Pueden convertirse en cualquier otro tipo de proteína que el cuerpo necesite.
Los suplementos de colágeno
Aún así, la gente se remite a las pruebas que ofrece la gente que consume colágeno. Nos fiamos de las recomendaciones de ciertas personas o personajes públicos, a veces más que de lo que nos puede decir un experto (¡acude siempre a un especialista para saber su opinión médica!).
Si tienes ganas de confirmar o desmentir su eficacia, nosotras sólo podemos recomendar que escojas preparados de calidad farmacéutica. Al estar catalogado como suplemento alimenticio, no vamos a encontrar una misma rigurosidad o exigencia como en la de un medicamento, y lo que compremos puede no ser de una calidad recomendable. Así pues, mejor apostar por los laboratorios, que sí se rigen por unas pautas más estrictas y fiables. Además, inclínate por esta opción si verdaderamente lo necesitas, y no por inercia o consumo masivo.
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Uno de los suplementos más conocidos es Unique Pink Collagen, elaborado por la farmacéutica Meritxell Martí. Tiene ingredientes naturales de calidad y antioxidantes que multiplican su eficacia (considera esto si vas a hacerte con un suplemento de colágeno hidrolizado).
Celebrities como Khloe Kardashian también han caído rendidas a sus supuestas bondades. Junto con la nutricionista Libby Matthews, fundó Dose & Co, una empresa que comercializa suplementos de colágeno y se diferencia por la sostenibilidad con la que produce, empaqueta y distribuye sus productos. Sus usuarias dicen tener una piel más lisa, un pelo más grueso y unas uñas más fuertes.
Kate Hudson, Kourtney Kardashian, Gwyneth Paltrow y nuestras españolas Eva González y Gracy Villareal también dicen estar obsesionadas por este producto. Aunque no hay estudios oficiales que garanticen esa eficacia real de la que muchos hablan, el hype es real. A nosotras nos encanta cuidarnos y nos apasiona el mundo de la belleza, y más si viene desde dentro gracias a ingredientes naturales. Pero, sobre todo, confiamos en las recomendaciones de los especialistas.
El Attelier Magazine
