¿Te imaginas a alguien vistiendo una prenda que ha sido diseñado por ti? La sensación parece increíble, pues algo que ha salido de tu creatividad, ahora forma parte de la personalidad de alguien. La simple idea suena bastante bien, pero te sorprendería saber que son más los que lo sueñan que aquellos que realmente se atreven.
Con el objetivo de brindarte un poco de claridad en el asunto hemos elaborado una guía rápida sobre cómo crear tu propia marca de ropa. Sin embargo, si quieres profesionalizarte en este ámbito, te recomendamos acceder al máster en dirección y creación de marcas de moda, donde te facilitarán los conocimientos, herramientas y habilidades para diseñar, desarrollar y gestionar marcas y negocios de moda.
No te mentiremos, el proceso parece más simple en palabras que en acciones, pero eso no significa que sea imposible. Para ilustrarlo de una manera más sencilla, te lo presentamos en formato de lista, así puedes ir tomando nota y comenzar este proceso.
- Haz un análisis exhaustivo del mercado
Es aquí donde surgen las dudas más difíciles de responder, ¿qué tipo de accesorio quieres producir? ¿La confeccionarás desde cero o buscarás un proveedor? ¿A qué edades va dirigida tu marca? Pues una vez que tengas respuestas para estas preguntas, la primera fase está casi completa. Si tienes claras tus ideas sobre qué tipo de prendas definirán tu marca, entonces el proyecto comenzará a cobrar fuerza a medida que produces tus primeras piezas.
- Hora de registrar la marca
Si tienes un producto con potencial, no querrás que algún astuto termine robándote la idea. Recuerda, antes de presentar públicamente un boceto o elemento de tu marca, debes proteger tus intereses y registrar tu marca.
El proceso de registro suele ser un poco intimidante, pero si valoras tu trabajo y has hecho algunas proyecciones del alcance de tu marca, va a valer la pena. Puedes creerlo, este es un paso que va a cuidar tu marca de cualquier intento de plagio, te sorprendería descubrir cuántas marcas estarían dispuestas a robar sus ideas a pequeños emprendedores.
- Diseña tanto como puedas
Tenemos que ser sinceros con nosotros mismos y conocer nuestras capacidades. Si no poseemos conocimientos de diseño, posiblemente necesitaremos la ayuda de un profesional.
No te preocupes, probablemente, te irá mejor plasmando tus ideas a través del talento de un diseñador que haciéndolo tú mismo. Si no manejas herramientas de diseño, te llevará más tiempo lograr un resultado aceptable que te inspire a avanzar. En cambio, un experto que sea capaz de potenciar el proyecto y reducir los tiempos, será alguien muy valioso para tu marca.
- El tipo de técnica para personalizar
Aquí llegamos a un punto clave del proceso de crear tu marca, ya que, se vincula con la durabilidad del producto final. Por ejemplo, hay técnicas como el vinilo textil, que, por su facilidad, suele ser una de las opciones más populares. Por otra parte, también existen alternativas como la sublimación y la serigrafía, que también destacan como las favoritas.
Si profundizamos un poco más, nos encontramos con el transfer, DTG y el DTF, así que, tienes una galería de alternativas que podrías usar para personalizar tu marca. No obstante, aunque tengas la seguridad de la técnica a aplicar, debes decidir si aprender a hacerlo tú mismo o contratar a un tercero. Desde nuestra percepción, esto representa un gasto adicional, así que, puedes iniciar con una técnica sencilla, que te permitirá ahorrar en el presupuesto inicial.
- Crea una campaña de marketing
Todos quieren el éxito absoluto desde el inicio, pero conseguir un lugar entre la competencia exigirá algo de esfuerzo. Si no quieres invertir demasiado, las redes sociales suelen ser una herramienta poderosa.
Segmenta bien tu mercado y crea un branding adecuado, así sólo será cuestión de tiempo para comenzar a ganar visibilidad. Interactúa con tus potenciales clientes, crea publicación de calidad y mantente constante. Asegúrate de cerrar cada día con nuevos logros para tu marca. Puedes analizar los números en seguidores, ventas y ganancias.
Toda marca debe tener una identidad sólida que conecte con su público objetivo. Una vez que logras que te identifiquen, el esfuerzo debe enfocarse en mantenerse y no decaer ante la competencia. Haz un plan de reinversión, y no te desesperes si las cosas toman más tiempo de lo que pensaste. Si piensas en grande, fórmate profesionalmente para ello y asume el reto con mejores proyecciones de éxito.
El Attelier Magazine