Historias y cuentos divertidos, pero también educativos y creativos. Así es el nuevo libro infantil de Marga Ozonas con el que podrás disfrutar de un bonito rato de lectura con los más pequeños de la casa.
Ilustración de la letra R
Marga es consultora internacional de igualdad de género. Y te preguntarás, ¿En qué consiste su trabajo? Pues bien, el objetivo de este es “apoyar a los gobiernos a mejorar sus políticas y presupuestos públicos para que tengan un impacto positivo en la vida de las mujeres, y por lo tanto, en la sociedad en general”. Nos menciona un ejemplo para que comprendamos con mayor claridad la función de su trabajo. “En Myanmar, he trabajado revisando y estimando el coste de su primer proyecto de ley de violencia de género”. “Mis “clientes” suelen ser agencias de Naciones Unidas, quienes me contratan para apoyar proyectos en países en desarrollo de distintas regiones: América Latina, Asia, Pacífico, países árabes… En España también he trabajado, pero realmente el foco de mi trabajo se centra en la cooperación internacional”.
Un hobby que terminó siendo una realidad
Marga, además de escritora, es mamá. Una mamá que buscaba cuentos diferentes para sus peque, por lo que un verano en Galicia se le ocurrió la idea de escribirle un cuento a su hijo Guillermo. “La idea fue cobrando fuerza y me puse manos a la obra en un proceso que duró dos años. Fue un proceso creativo muy bonito que disfruté mucho, primero escribiendo los textos, y luego ilustrándolos con mis hijos, Guillermo -y Pablo-, que con dos añitos pintó los garabatos que aparecen en la cubierta y en otras ilustraciones”.
“Abecedario solidario. Cuentos con valores”
Marga nos presenta hoy su última publicación, “Abecedario solidario. Cuentos con valores”. Una historia llena de valores con la que tus hijos van a pasar un rato de lectura divertido aprendiendo. “Tiene muchos valores y estos se vinculan a los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Quizás el más presente es el respeto, cuidado y amor por la naturaleza, un valor que a mí me inculcaron en la infancia y me acompaña siempre. El libro habla mucho de reciclaje, limpieza, de la protección de las especies, bosques, mares y lagos, de sostenibilidad”.
“Hay valores relacionados con los derechos humanos: la igualdad, la justicia, la libertad, la no discriminación, el acceso a la educación, etc. En cada cuento, las protagonistas de la historia son dos hermanas (la letra mayúscula y la minúscula), y en cada historia aparecen estos valores. Por ejemplo, en el cuento de la letra I, trata sobre un mundo imaginario que le cuenta una letra a su hermana, donde hay dos tipos de insectos; un grupo de insectos tiene privilegio y el otro no. Este cuento trata sobre el concepto de la igualdad y la justicia social”.
“También hay valores relacionados con aptitudes: la resolución de problemas, la solidaridad, la empatía, el trabajo en equipo, la integridad, el emprendimiento, entre muchos otros. Y también, valores sobre las actitudes, como la gestión de la frustración o del miedo, o el valor del esfuerzo y del trabajo”.
¿Por qué te decantas a escribir un cuento de esta temática para niños?
Uno de los lemas de la sabiduría ancestral de comunidades indígenas es: “valores primero, luego herramientas”. Mi libro va en esta línea de pensamiento: transmitir valores en la infancia es algo que ayuda a formar y educar a personas en coherencia con valores universales de respeto al planeta, a las personas y a los animales. El libro lo escribí pensando en mis hijos. Quienes les quería transmitir valores que yo aprendí de pequeña, o que he ido aprendiendo a lo largo de la vida y que creo que son indispensables. El cuento de la letra L, por ejemplo, es uno de mis favoritos, es una oda al cuidado y disfrute de la naturaleza, a la libertad, al feminismo y a la lucha de los estereotipos y prejuicios de género.
Como consultora de igualdad de género, ¿crees que el mundo está avanzando en buen camino hacia una igualdad de género? ¿Qué aspectos te hacen pensar en tu respuesta?
En base a los datos y mi propia experiencia trabajando en esta temática, creo que hay avances, pero también creo que son pocos, lentos e insuficientes. Por ejemplo, en los últimos 50 años se han llevado a cabo en el mundo más de 1500 reformas para mejorar la participación económica de las mujeres; sin embargo, actualmente los derechos legales de las mujeres son una cuarta parte inferior a las de los hombres (Banco Mundial, 2020).
Aún existen países con leyes discriminatorias que prohíben a las mujeres a acceder a ciertos puestos de trabajo, a servicios sanitarios, a heredar, a ser propietarias de terrenos, a abrir una cuenta bancaria. Según Naciones Unidas, las mujeres dedican tres veces más tiempo que los hombres a la prestación de cuidados sin remuneración, y una de cada tres mujeres en el mundo sufre violencia en el transcurso de su vida. La violencia contra las mujeres se ha exacerbado debido al impacto de la COVID-19, y esto muestra la insuficiencia de la respuesta pública en prevenir este problema, la escasa financiación de las políticas y la cruda realidad: que el machismo sigue instaurado en las sociedades.
El gran reto es combatir los prejuicios de género que limitan las posibilidades de las mujeres y se ve reflejado en distintas esferas. Por ejemplo, menos del 10% de todas las naciones estén lideradas por mujeres.
Me gusta una frase que dijo Michelle Bachelet: “Si una mujer entra en la política, cambia la mujer. Si muchas mujeres entran en la política, cambia la política”. Y esto, en mi opinión, aplica a todos los sectores y ámbitos más allá de la política. Para concluir, comparto una reflexión: “El feminismo no es una corriente de pensamiento, es un derecho humano”. Hasta que este concepto no cale en los gobiernos, en las empresas, en la sociedad y en el interior de los hogares, no habremos avanzado en la igualdad de género.
Cuentos con encanto y una entrevista llena de valores y buen rollo es la que nos ha ofrecido Marga. Es el momento de adentrar a los pequeños de la casa en la lectura. Sus cuentos infantil cargados de valores de derechos humanos, de principios feministas y de aspectos de educación positiva y gestión de emociones son la caña para pasar un rato divertido.
El Attelier Magazine
