La sostenibilidad está a la orden del día y, como sabéis, a nosotras nos encanta hablar de ella. Con pequeños esfuerzos, se puede empezar a cambiar un sistema que necesita una actualización urgente. En este caso, os traemos una forma de sostenibilidad muy fácil y cada vez más extendida: la compraventa de objetos y prendas de segunda mano. Aunque ya la conocerás e incluso puede que ya la hayas practicado, queremos profundizar un poco en el tema y reflexionar. ¡Vamos!
La sostenibilidad y la compraventa de segunda mano
El concepto de comprar, vender e intercambiar objetos y prendas de ropa de segunda mano siempre ha existido. Pero, en los últimos años, se ha dado un auge increíble por la preocupación que supone el cambio climático. Nos hemos dado cuenta de que el sistema en el que nos encontramos es inviable. Somos una sociedad consumista que produce y consume a unas velocidades vertiginosas y completamente innecesarias.
El sector de la moda es el segundo más contaminante y da miedo pensar en las consecuencias climáticas que pueden derivar de la producción de una simple camiseta de algodón, o de los 92 millones de toneladas de residuos textiles que producimos al año (la cifra de por sí es bastante impactante). Muchas personas no son conscientes, o prefieren apartar la mirada.
Una de las medidas que la sociedad ha tomado, llevada por la preocupación y la motivación de frenar este aceleramiento, es intentar pasar a una economía circular, donde aquello que ya no usamos o ya no nos sirve, pueda tener una segunda vida en manos de otra persona, y así constantemente.
La marca Levis, por ejemplo, promueve la acción de reciclar nuestros pantalones rotos, desgastados o irreparablemente sucios, para diseñar unos nuevos de una manera sostenible. De esta manera, contribuimos a un menor desperdicio, y a una producción y un consumo más responsable.
¿Estamos siendo más sostenibles?
Las empresas han ido adoptando diferentes medidas para poder contribuir a una industria más responsable y sostenible. También hemos atendido a un gran número de incorporaciones de empresas a la industria que proclaman tener un modelo 100% sostenible, lo cual ofrece muy buenas noticias.
Sin embargo, esto no es suficiente. Aún existen un sinfín de grandes empresas dedicadas al fast fashion que, por muchas medidas o colecciones “sostenibles” que saquen, no harán más que contribuir al cambio climático. Al final, lo que hacen es greenwashing. No puedes vender que eres sostenible cuando abogas por un sistema de consumo irresponsable bajo unas condiciones ínfimas.
Así pues, los consumidores nos estamos poniendo las pilas y estamos apostando, cada vez más, por las tiendas vintage y de segunda mano. Somos víctimas del fast fashion, caemos en un círculo vicioso muy tóxico y cuesta mucho salir de este. Pero podemos encontrar un balance que nos aporte a nosotros, y al planeta, un bienestar más que buscado.
¿Por qué apostar por el modelo de consumo de segunda mano?
Pues bien, la razón más importante ya la hemos mencionado: la sostenibilidad y el bienestar del medio ambiente. El sistema de producción y de consumo actual es inviable y necesita un cambio radical. Por otro lado, este modelo trae consigo otras graves consecuencias que, quizás, vengan bastante más camufladas a nosotros, los consumidores. Y es que, comprar una camiseta por cinco euros en una tienda solo puede significar una cosa: mano de obra barata y pésimas condiciones de trabajo.
Debemos darnos cuenta de la responsabilidad que, como consumidores, tenemos. No podemos pagar precios tan bajos y taparnos los ojos ante lo que se esconde detrás. No estamos pagando todo el trabajo que hay detrás, y los trabajadores no están recibiendo ni la mitad, a costa, además, de su salud.
Eso sí, podemos pagar cinco euros en una tienda o app de segunda mano por una prenda con una calidad decente y a veces incluso mejor, y un mayor equilibrio social. Esto, además, afecta positivamente a tu bolsillo. Gastarás menos y conseguirás una mejor calidad, si sabes buscar bien.
Poco a poco, conseguirás dejar atrás las tendencias pasajeras y te empezarás a centrar más en lo que te gusta a ti personalmente, en tu estilo particular y en tus necesidades. Este cambio de mentalidad es difícil, pero necesario para seguir avanzando por este camino de sosteniblidad. Necesitamos conocernos y encontrar un estilismo único con el que nos sintamos cómodas y guapas. Pasaremos a comprar menos cantidad pero más calidad.
Dejando de lado el punto de vista del consumidor, también a ti, como persona cuyo armario rebosa de ropa, te vendría bien una limpieza. Dedica algo de tiempo a limpiar, organizar y reflexionar sobre las prendas que ya no usas o necesitas. ¡Alguien más les dará cariño! Y tener un armario donde las prendas sean más visibles y estén más ordenadas te hará sentir mucho más relajada y hará tu día a día y tus elecciones más fáciles. Además, ganarás dinero haciéndolo. Es un win-win en toda regla.
Apps de segunda mano
Si eres de las que les gusta comprar y vender desde la comodidad de su sofá, hay ciertas apps imprescindibles con las que te viciarás. En Wallapop, Ebay, Cash Converters y Letgo podrás encontrar todo tipo de objetos y verdaderas joyas a precios irrisorios.
En cuanto a prendas de ropa, Vinted es, sin duda alguna, la más conocida y extendida, siendo muy cómoda de usar. Puedes encontrar todo tipo de prendas o accesorios. Existen otras apps, como Vestiaire Collective, con un rango de calidad medio alto y alto, donde podrás adquirir prendas de grandes marcas o bolsos de diseñador a precios mucho más económicos.
Alquiler de prendas y accesorios
Este modelo de consumo es más reciente, pero está ganando adeptos y adeptas de una manera muy rápida. Nació como una opción más asequible de acudir a grandes eventos o bodas. A menudo, nos invitan a ciertos acontecimientos y compramos prendas muy bonitas pero muy caras y poco prácticas, que no nos pondremos más y acaban ganando polvo en el armario. Así, surgieron nuevos modelos de negocio como Ecodicta, Jointy, La más mona, Armario infinito, La Modateca o Pantala, con los que conseguir un outfit de ensueño a un precio mucho más económico y que podrás devolver después.
En concreto con la app de Jointy tienes acceso a un armario compartido lleno de prendas para ser la invitada perfecta sin tener que gastar una fortuna. Gracias a la app, el ahorro está al alcance de tus manos, o mejor dicho, de tu móvil. Ahora puedes lucir los mejores modelitos sin que tu cuenta bancaria acabe temblando. Ahorrarte unos eurillos y así puedes destinarlos a esas pequeñas alegrías de la vida, como ese viaje con las amigas que lleváis planeando desde el instituto.
Y oye, es un puntazo también ir estupenda a un evento mientras te unes a la noble causa de la sostenibilidad y la moda circular. En nuestra charla con Giuisi Lara, nos recordaba que el equilibrio entre la sostenibilidad y las tendencias es clave. El consumo responsable también es un desafío al que debemos enfrentarnos, y estas apps nos brindan la oportunidad de hacerlo. Gracias a las plataformas de segunda mano y el renting, podemos encontrar prendas de calidad a precios accesibles, evitando así la sobreproducción y el derroche innecesario. Es el matrimonio perfecto entre la moda y la conciencia ambiental.
Sin embargo, no solo podrás adquirir ropa especial para eventos, sino que desde hace poco también podremos obtener ropa de a diario. En este tipo de apps o webs se paga un alquiler por una prenda o una suscricpión mensual que te conseguirá un conjunto de prendas que podrás ponerte tantas veces como quieras en un mes y, después, devolverlas para que las use otra persona. De esta manera, podrás vestir en tendencia y lucir nuevos modelitos siendo más responsable y sostenible.
Otros modelos innovadores y sostenibles
Existen otras empresas, como Gratix, donde el modelo es completamente innovador. La base es regalar o donar productos que ya no queremos o no usamos para que las pueda conseguir alguien que sí les pueda dar uso. Tienen un sistema de puntos o karma para que los consumidores no puedan abusar, y tú también puedas obtener objetos en los que estés interesada.
Proyecto “Re-Cycle” llega a España
Se trata de un proyecto dedicado a la recogida, venta y reciclaje de artículos de segunda mano de la plataforma francesa Veepe que eligió España como su primer mercado internacional para lanzar “Re-Cycle”. La iniciativa, implementada desde diciembre de 2020 en Francia, permite a los usuarios de Veepee enviar de forma gratuita prendas, calzado o accesorios ya usados, “sin importar su estado ni origen de compra”.
Para esto, la plataforma cuenta con una marca colaboradora y se les ofrece a los usuarios un cupón para usar en ella. En España, Veepee se ha asociado con Camper. Los usuarios podrán donar sus pares de calzados usados y recibirán un cupón de 20 euros para comprar los productos de la marca. Luego de la recogida de los artículos, la compañía se ocupa de la gestión y del destino de las prendas o el calzado. También, se ocupará de su clasificación según se destinen a venta o reciclaje.
Es más, un estudio conjunto de BCG y Vestiaire Collective revela que el tamaño del mercado de la moda y el lujo de segunda mano se ha triplicado desde 2020, sin signos de desaceleración. El mercado de segunda mano ya representa entre el 3% y el 5% del sector global de la ropa, el calzado y los accesorios y podría crecer hasta el 40%. Actualmente, los artículos de segunda mano constituyen aproximadamente una cuarta parte de los armarios de los consumidores de segunda mano y se espera que para 2023 constituyan el 27% de los armarios de un comprador medio. Los de la generación Z son los más propensos a comprar (31%) y vender (44%) artículos de segunda mano, seguidos de cerca por los millennials.
La sostenibilidad es un factor cada vez más importante para los consumidores de segunda mano
El informe se basa en dos encuestas mundiales realizadas a 6000 consumidores en 2020 y a 2000 más en 2022 para comprender mejor su compromiso con el mercado de la compraventa o reventa. Aunque más de la mitad de los encuestados citaron la asequibilidad como el principal motor para comprar artículos de segunda mano, esta tendencia está disminuyendo. La variedad de productos es el segundo factor que impulsa el consumo de artículos de segunda mano. El 40% de los compradores considera que la segunda mano es su forma de consumir moda de forma sostenible y el mismo número elige el mercado de segunda mano por la gran variedad y las piezas únicas que ofrece. La emoción de “la caza del tesoro” y la oportunidad de negociar los precios con los vendedores son también factores cada vez más populares para la compra de artículos de segunda mano, ya que el 35% de los encuestados los señalan como sus motores.
Como ves, estamos dando el gran paso de una sociedad consumista a una sociedad más responsable y los negocios de segunda mano o de economía circular cada vez son más frecuentes y beneficiosos. No todos los héroes llevan capa, pero igual llevan un Fendi de alquiler. Si aún no has dado el paso, dalo. Y, si ya lo has hecho, promuévelo entre tus conocidos. ¡Conseguiremos mucho con muy poco!
El Attelier Magazine
