Si hay algo que marca definitivamente el fin de las navidades, esa es la cuesta de enero. Cuesta que no solo se reporta económicamente, sino mentalmente. Y es que después de un período de fiestas tan agradable y largo, todo tiene consecuencias. Después de todos esos banquetes, regalos y caprichos, la temida cuesta de enero no es solo una leyenda urbana, sino una dura realidad que todos debemos afrontar. Pero, ¡tranquilidad! Estamos aquí para compartir contigo cinco consejos básicos que te ayudarán a navegar por este desafío financiero con estilo y gracia. 😉
Trucos para superar la cuesta de enero con estilo
Saca a la gran ahorradora que hay en ti
Hay algunos tips que pueden serte útiles. Si crees que eres muy “gastona” con tu tarjeta porque no percibes cuándo se acaba, dejemos que la tarjeta de crédito descanse en tu casa y saquemos a relucir nuestro efectivo con estilo. Es como darle un toque retro a tu vida financiera, ¡y quién sabe, podría convertirse en la última tendencia en moda económica! Además, puedes llevar un control de tus gastos en una libreta o, si eres realmente moderno, en una hoja de Excel. De esta manera, podrás convertirte en la gurú de tus finanzas, como un diseñador de moda que conoce cada detalle de su última colección. Haz un seguimiento mes a mes, ¡y pronto serás la envidia de tus amigas! Además, siempre es divertido ver en qué se nos va el dinero, ¿verdad?
No te ciegues con las rebajas
Enero es sinónimo de rebajas. Si vas de tiendas, ve siempre a por los grandes descuentos y compra (o procura comprar) solo aquello que necesites. No caigas en la tentación y sé prudente. Si buscabas unas botas, no vuelvas a casa con un abrigo, unos pantalones y un par de camisas. Si algo te gusta, pregúntate: ¿Realmente lo necesito? ¿Me estoy dejando llevar por el consumismo o por las nuevas tendencias?
Recuerda este post sobre los 10 mandamientos que hay que tener en cuenta a la hora de las rebajas.
La cuesta de enero llevada con estilo
Evita salir a cenar fuera todos los findes
No salgas a cenar o comer fuera, ya has tenido bastantes cenas familiares, de empresa o con amigos. Aprovecha la cuesta de enero para aprender a cocinar algún plato nuevo o para sacar partido a la comida que te ha sobrado esta Navidad. Por ejemplo, puedes hacer una deliciosa tarta de Ferrero Rocher, galletas caseras, pudding de turrón… Saca tu lado “cocinillas” y aprovecha lo que ya tienes en casa.
Compara precios en básicos
Con el nuevo año, pueden subir los precios de algunos productos. Por ello, compara el precio de algunos alimentos básicos como la leche, el pan o el aceite en distintos supermercados. Esto requiere tiempo pero es realmente efectivo porque en algunos supermercados hay muy buenas ofertas y eso en plena cuesta de enero, se agradece bastante.
Planea y organiza
Organiza tu mes, lo que vas a hacer cada fin de semana, adónde quieres ir, los gastos fijos (vivienda, transporte, impuestos, etc.) y evita así los gastos innecesarios que puedes llegar a tener. Fíjate un presupuesto e intenta no sobrepasarlo.
En resumen, ser consciente del equilibrio entre tus gastos e ingresos hará que este desafiante mes de enero, después de las festividades, sea mucho más llevadero. Y, para añadir un toque de emoción a tu viaje financiero, establece un objetivo claro que te inspire a mantener el control. ¿Qué tal planificar tu próximo destino de vacaciones? ¡Así cada compra que hagas te acercará un poco más a tu paraíso soñado! Con determinación, humor y una pizca de estilo, estarás lista para enfrentarte a la cuesta de enero con confianza. ¡Que empiece el juego de la moda financiera!
El Attelier Magazine