Seguramente te apasionan las flores tanto como a nosotras. Y es que pensamos, que son lo más en decoración. Descubre el nuevo furor: las flores secas y sus diferencias con las flores preservadas.
Flores secas vs. flores preservadas
¿Pensabas que flores secas y preservadas eran lo mismo? ¡Estabas equivocada! Para que no vuelvas a caer en este error, te contamos sus diferencias.
Las flores preservadas son tratadas de forma diferente a las flores secas. Son naturales 100%, sometidas a un proceso tras su corte, en el que la savia y el agua son sustituidas por un líquido preservante que le aporta su aspecto. En otras palabras, son rehidratadas pero en apariencia se muestran naturales. Mantienen su olor y se conservan sin necesidad de agua.
Seguramente tampoco sabías que no todas las plantas son compatibles con este proceso, por ello, también te contamos qué son las flores secas, con las que se combinan y sus diferencias de secado.
A diferencia de las preservadas, las flores secas se dejan secar por deshidratación de forma natural, boca abajo. Una vez secas, es posible recuperar parte de su aspecto original sometiéndolas a tratamientos de coloración y fijación.
Tanto unas como otras se pueden teñir y podrás hacer grandes combinaciones. No te recomendamos ponerlas en lugares de cambios bruscos de temperatura o de luz, ya que su aspecto puede verse afectado.
@atixhome la marca que está triunfando en Instagram
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