Cuando pensamos en protector solar, tenemos la costumbre de considerarlo como un producto que únicamente debemos usar durante el verano, pero hay que tener en cuenta que cuando se acaba la época estival, aunque más lejos, también hay sol y, por tanto, es imprescindible el uso del protector solar en invierno.
Debemos cuidar nuestra piel todo el año, ya haga frío o calor. Incluso en invierno es más importante protegernos la piel. Te dejamos las 5 razones por las que deberías tener esto en cuenta, y la protección solar se va a convertir en must de tu rutina de skincare cada mañana.
¿Qué es realmente el protector solar?
El protector solar es un producto diseñado para aplicarse sobre la piel, cuyo objetivo principal es proteger nuestra piel de la radiación ultravioleta (UV) del sol.
La radiación UV puede causar daño en la piel, incluyendo quemaduras solares, envejecimiento prematuro y aumentar el riesgo de cáncer de piel. El protector solar actúa como una barrera que absorbe, refleja o dispersa los rayos UV antes de que puedan penetrar en la piel.
Los protectores solares contienen filtros solares que absorben o reflejan la radiación UV. Existen dos tipos principales de filtros solares: los químicos y los minerales. La principal diferencia es que los filtros químicos absorben la radiación UV y la convierten en calor, de lo contrario los filtros minerales reflejan la radiación UV alejándola de la piel.
¿Sabes lo que significa el factor de protección FPS? Es un indicador de cuánto tiempo una persona puede exponerse al sol sin quemarse en comparación con no usar protector solar. Cuanto más alto sea el FPS, mayor será la protección. Se recomienda un FPS de al menos 30 para una protección efectiva, pero recuerda solo estarás protegida al rededor de 30 minutos.
Además de los filtros solares, los protectores solares pueden contener ingredientes adicionales como antioxidantes, hidratantes y vitaminas para proporcionar beneficios adicionales a la piel, esto es otra razón por la que incorporar este producto a tu rutina de cada mañana.
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Diferentes formatos de protección solar
Los formatos de la protección solar han evolucionado mucho durante los últimos años, alguna de las razones por las que muchas personas no lo utilizan es por su aplicación. Pero tienes que saber que todo ha cambiado, y ahora es muy sencillo proteger nuestra piel del sol.
Además de la falsa creencia de que si aplicas protección solar, tu rostro se verá pálido y después los productos de maquillaje no se integrarán bien. No hagas caso a este vieja leyenda, ya que el mundo de la cosmética y cuidado facial ha avanzando tanto que muchos protectores solares se sienten como si realmente no llevases absolutamente nada sobre la piel.
Actualmente puedes encontrar diferentes formatos de protector solar: lociones, cremas, geles, aerosoles y sticks. Esto te permitirá poder elegir la fórmula que mejor se adapte a tus necesidades, y lo más importante que mejor funcione con tu tipo de piel.
En concreto, los aerosoles solares son como una bruma. Nos parece la opción perfecta si vamos a estar fuera de casa mucho tiempo, y estamos expuestas al sol. Su aplicación es sencilla y rápida, y podremos retocarnos fuera de casa. Los sticks también son una opción buena, si no vamos maquilladas, ya que podemos refrescar el rostro a lo largo del día, proporcionándole la luminosidad que pierde a lo largo del día.
Elijas el formato que elijas, es importante que siempre protejas tu piel del sol. Si quieres mantener tu piel joven, sin arrugas y sin manchas el producto que te ayudará a conseguir una piel perfecta es el protector solar, y no una larga lista de sérums, cremas especificas y tratamientos estéticos. La protección solar es vida, te dejamos las 5 razones que te terminaran de convencer para incorporar a tu vida este producto.
¿Por qué usar protector solar también en invierno?
A pesar de haberse acabado el verano, los rayos UVA pueden llegar a ocasionar los mismos daños que los rayos UVB. La mayoría de las personas tienden a no proteger la piel del mismo modo que en la época estival. Por ello, varios expertos aconsejan el uso de un buen protector solar durante el invierno. Dos de las consecuencias provocadas por el sol en estos meses son la tirantez y la resequedad. Pero existen otros riesgos mucho peores y que se debería de tener en cuenta.
Enfermedades graves de la piel
Uno de ellos es el cáncer de piel. Según la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) existe en la actualidad más de 100.000 casos en todo el mundo con melanoma, un tumor poco frecuente pero es el más grave. La causa mayor es la exposición al sol, provocando pequeñas manchas que pueden ser visibles o no. Esto es un motivo más que razonable para acudir a un médico especialista una vez al año y hacerse una revisión.
Aparición de arrugas tempranas
Otro problema que existe es la aparición de arrugas. El envejecimiento de la piel también es ocasionado por una larga exposición al sol. Recuerda que esta capa tiene memoria y, a pesar de que no nos salga ahora, es probable de que nos salga más adelante.
La nieve provoca quemaduras
Muchos de los planes más típicos en invierno son los relacionados con la nieve. En estos casos, hay que ser conscientes de que la nieve funciona como un espejo, es decir, los rayos del sol rebotan llegando a penetrar en nuestra piel, ocasionando rojeces o quemaduras. Por lo tanto, si vas a ir a esquiar o a un sitio nevado, lleva siempre contigo un protector solar a mano.
Los días nublados
A pesar de que el sol se oculte en un día nuboso, no lo subestimes. Los rayos traspasan las nubes y llegan a nuestra piel del mismo modo que cuando está el cielo despejado. En estos días es igual de imprescindible el protector solar.
La piel blanca es la más afectada
Si tu piel es más blanca, tienes una razón de más para usar el protector solar. Las pieles con esta tez deben estar más protegidas porque tienen más facilidad de quemarse por el sol. Por ello, es también recomendable saber cuál es tu tipo de piel y preguntar qué clase de protector solar necesitas.
Por todo esto, es importante tener nuestra piel bien nutrida e hidratada y conocer los riesgos y factores que pueden dañarla. El protector solar no solo ayuda a evitar quemaduras, también la protege ante cualquier peligro.
Es recomendable tener en tu bolso un protector solar tanto para la cara como para las manos ya que son las zonas de nuestro cuerpo más expuestas en invierno. Los expertos aconsejan aplicar el producto media hora antes de salir a la calle.
Después de descubrir estas razones, es importante que, independientemente de la época, un buen cuidado podrá evitar consecuencias extremas.
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