Tic, tac, se acercan las vacaciones de verano, las clases terminan y los padres tratan de encontrar actividades para entretener a sus pequeños llenos de energía. Puedes ir a la piscina, llevarlos al campamento, pero el verano es largo y a veces te quedas sin opciones. Para aquellos momentos en los que te encuentras atrapada entre esas cuatro paredes presa del pánico, aquí tienes algunas recomendaciones de planes divertidos para hacer con los niños en verano sin salir de casa.
Día a lo ‘Art Attack’
¡Día de manualidades en casa! Saca los materiales, hazte con papeles de colores, rotus y tijeras y prepárate para un desfile de creatividad sin precedentes. Pueden construir castillos de cartón, hacer pulseras de cuentas tan fashions que hasta Anna Wintour las envidiaría, o por qué no, crear su propio collage con recortes de revistas que bien podrían pertenecer a una galería de arte contemporáneo.
Así que prepara el espacio de trabajo, ponte el delantal de artista y déjalos que se conviertan en los Picassos del siglo XXI. Solo ten en cuenta que los restos de papel, pegamento y purpurina pueden convertirse en un recordatorio eterno de esta aventura creativa, así que ten cuidado de dónde montar el taller.
Los juegos de construcción también son otra opción para jugar con los niños en verano (y más limpia). Sí, esos pequeños ladrillos y piezas que ponen a prueba tu paciencia y habilidades de ingeniería. A los niños les encanta, les ayuda a desatar su imaginación y crean estructuras que desafiarían las leyes de la física. Prepárate para presenciar la Torre Eiffel versión Lego, un rascacielos de piezas de juegos Janod o incluso una nave espacial. Y en este grupo también podríamos incluir los puzzles, que destacan por ser lúdicos, divertidos y por ese rato de concentración absoluta desde que se empiezan hasta que se terminan.
Un cine diferente para los niños en verano
Convierte tu sala de estar en un auténtico cine. Elige una película divertida y prepárate para una tarde de palomitas y risas. Despliega colchonetas y almohadas por el suelo para hacerlo más divertido, prepara algunos tentempiés saludables o alimentos ultradeliciosos y nada saludables, depende del día y lo que mejor te venga. Aquí el detalle está en la disposición del surtido, para que los niños alucinen con el pedazo de fiesta que has montado.
Si quieres llevar la experiencia cinematográfica a otro nivel, construye con ellos un fuerte con mantas y sillas para ver la película desde dentro de vuestra propia fortaleza. Será el cine más exclusivo y divertido de todos los tiempos (y más barato).
Muchas ciudades y pueblos organizan proyecciones de películas bajo las estrellas durante el verano. Busca eventos locales donde puedas llevar a tus pequeños monstruos a disfrutar de películas en grandes pantallas al aire libre. No olvides llevar mantas para acurrucarte y bocadillos para matar el hambre.
Tarde de juegos de mesa
Organiza una tarde de juegos de mesa y prepárate para experimentar emociones intensas junto a los niños en verano. Elige clásicos como el Monopoly, donde podrás disfrutar de la emoción de la compra y venta de propiedades mientras te preguntas por qué siempre terminas en la cárcel.
Otra opción es el Uno, ese juego de cartas aparentemente inocente que desata tu lado más malvado y te hace lanzar cartas “+4” a diestro y siniestro, dejando a tus oponentes llenos de resentimiento y ganas de venganza.
Si quieres poner a prueba tus habilidades artísticas (o tu total falta de ellas), el Pictionary es tu mejor opción. Y si alguien se ofende por tu “arte abstracto”, solo dile que es una obra maestra incomprendida. Si te sientes especialmente creativa y audaz, cread vuestro propio juego. ¿Quién necesita las instrucciones cuando puedes inventar tus propias normas absurdas?
Cocina en familia
¿Qué tal preparar pizzas caseras? Con una masa preparada del supermercado poned todo lo que se os antoje por encima y mételas al horno. No temas el desastre y sumérgete en la trepidante aventura de la cocina en familia. Aprende a reírte de los errores y a disfrutar de los sabores que solo tu familia puede crear.
Si te sientes con ganas de meter las manos en la masa con los niños en verano, siempre puedes recurrir a la magia de Youtube. Encontrarás un sinfín de vídeos de recetas sencillas para hacer con los niños. Por ejemplo, podéis hacer helados caseros.
Solo necesitas unos moldes y palitos, triturar un poco de fruta, yogur y luego dejar volar vuestra creatividad con las combinaciones. Tras unas cuantas horas en el congelador tendréis vuestros helados caseros, ¡y encima de fruta, para que los niños se puedan atiborrar de vitaminas sin darse ni cuenta! Pero si te da pereza manchar la cocina hasta el infinito, siempre puedes recurrir a los juegos de cocina de Janod y montar vuestro propio restaurante de 3 estrellas Michelín.
¡Hora de juegos al aire libre!
Si tienes un jardín, aprovecha el buen tiempo para organizar juegos al aire libre con los niños en verano. Desde carreras de sacos hasta juegos de pelota, pasarán horas riendo y quemando energía. O puedes iniciar una épica batalla de globos de agua. Pero espera, no estamos hablando de los típicos globos desechables que terminan pegados en los árboles o ensuciando las calles. No, no, no. En esta versión ecológica y reutilizable pueden ser lanzados una y otra vez, hasta 1000 veces.
Para una aventura nocturna, prepara una noche de acampada en el jardín. Monta la tienda y contad historias de miedo bajo las estrellas. Es una experiencia emocionante y diferente, ¡y todo sin tener que alejarte de casa! Además, si alguien necesita ir al baño en medio de la noche, ¡no hay problema!
Jugamos al Spa
Prepara tus mejores habilidades de esteticista y convierte tu hogar en un oasis de relajación y cuidado personal. Prepara baños de burbujas, mascarillas faciales (puedes optar por mascarillas de arcilla, de frutas o incluso de chocolate, pero cuidado con las cortinas), manicuras y pedicuras para toda la familia.
Asegúrate de tener a mano las famosas rodajitas de pepino para convertirlo en un juego de rol. Y mientras los pequeños disfrutan de su día de spa, no olvides consentirte a ti misma también. Tómate un tiempo para relajarte, desconectar y disfrutar de los beneficios de estos tratamientos caseros. Porque, al fin y al cabo, también necesitas un poco de atención. Además, cuando tus hijos te vean disfrutando se sentirán aún más emocionados y participativos.
Un extra: excursiones cerquita:
Explora los alrededores en bicicleta con toda la familia. Busca rutas seguras para los niños en verano donde puedan disfrutar del paisaje mientras hacen ejercicio. No olvides llevar cascos y equipamiento de seguridad para todos, no queremos que el paseo se convierta en una visita a urgencias.
Y cuando el cielo esté despejado, reúne a tu tribu y salid a un lugar alejado de la contaminación lumínica. Dedica una noche para disfrutar de la belleza del universo y buscar constelaciones… Aprovecha eventos astronómicos como la noche de las lágrimas de San Lorenzo (o la noche de las perseidas, que suena más poético) para hacer una excursión nocturna y pedirles deseos a las estrellas fugaces.
Esperamos haberte ayudado a construir con estos consejos aventuras y anécdotas divertidas para este verano, ¡Suerte, soldado!